3 de marzo de 2009

Cervezas

En Ámsterdam se realiza la convención mundial de productores comerciales de cerveza, a la que asisten los presidentes de las más prestigiosas compañías cerveceras del mundo.

Concluida la convención, todos los presidentes se reúnen a festejar el éxito del evento, para lo cual se encuentran en la cafetería del hotel donde ha tenido lugar la celebración.

Una vez allí, no consiguen ponerse de acuerdo en qué pedir.

Para romper el hielo, el presidente de Budweiser llama a la camarera más cercana y le dice:

- ‘Una Budweiser, por favor’.

Llega el turno entonces del presidente de Heineken, quien dice:

- ‘Para mí, una Heineken, si fuera tan amable’.

A continuación, pide el presidente de Miller:

- ‘Me gustaría tomar una Miller’.

Y el de Coronita:

- ‘Tráigame una Coronita’.

Y el de Guinness:

- ‘¿Me pone una Guinness?’.

Y así siguieron todos los presidentes de las compañías, pidiendo la cerveza que ellos mismos producían. El último en pedir fue el director de la entonces “cerveza de Córdoba”, El Águila [hoy Amstel], quien dijo:amstel-aguila2

- ‘Quisiera una Coca-Cola, por favor’.


La unica buena cerveza, la española! jeje, o al menos asi indica este señor

Sorprendidos, los demás presidentes le preguntan el porqué de tan extraña decisión, a lo que responde:

- ‘Si ustedes no van a tomar cerveza, yo tampoco‘.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ola carlos:
dime como puedo hacer publicidad porke no se!!
saludos

Anónimo dijo...

OLEEEEEEEEEE!!
TOMA YA ESA CONTESTACION!!
aunk no me gusta la cerveza ni española ni china ni alemana ni de los eskimales asi k ,...